Cambia tu película
por WebMaster em STUM WORLDAtualizado em 22/11/2015 07:52:40
por Willes S. Geaquinto - [email protected]
Traducción de Teresa - [email protected]
Reflexiona: ¿tendrías paciencia suficiente para mirar todos los días la misma película, sabiendo de antemano los nombres de los personajes, lo que dicen, el principio, el medio y el final de la historia?…
Pensándolo bien, lo bueno es ver nuevas películas, vivenciar nuevas emociones ¿cierto? Pero – siempre hay un pero - ¿sabías que hay personas que viven sus vidas como si fuese siempre la misma película, repitiendo incesantemente las mismas escenas, las mismas actitudes, el mismo argumento? Eso no te pasa a ti ¿verdad?
Entonces, ya que estamos hablando de otros, habrás observado a personas que actúan todos los días de la misma manera: todo el tiempo se están quejando de las mismas situaciones, de los mismos dolores, de los mismos sinsabores, protestan por todo y contra todos, día tras día, sin cesar…
Habrás percibido también que cuando intentas ayudarlas ni caso te hacen, no están por eso, chillan más que tú sólo por no oírte. Algunas incluso posan de sabelotodo, con frases tales como: “eso ya lo sabía”, “leí sobre esa cuestión”, “vi que hablaban sobre eso en la TV, ¿lo has visto tú?”, “tengo un conocido que es así...” Otras, cuando les sugieres hacer algo, contestan: “eso es bueno, pero...”; “Yo intento pensar en positivo, pero...”. Y entonces desgranan un interminable rosario de disculpas y dificultades; culpan a la familia, a la falta de suerte, al gobierno, y por increíble que parezca, hasta a Dios. Día tras día, la misma letanía, el mismo lloriqueo, la misma película, la misma novela.
Pues bien, todo eso sucede porque gran parte de la gente no se da ni cuenta de esa extraña repetición. Actúan de modo inconsciente y compulsivo, acostumbradas como están a darse poca atención a sí mismas; a no mirarse al “espejo” buscando conocer más a fondo sus propias vidas. Desde el punto de vista psíquico, ese comportamiento repetitivo puede ser definido como neurótico, pues la repetición sistemática de las mismas actitudes con la expectativa de que los resultados sean diferentes, y el aplazar constantemente los cambios, son presupuestos básicos de toda neurosis.
Ya que hablé tanto de repeticiones, voy a terminar aquí, para no incurrir en el mismo procedimiento. Deseo que medites y transformes tus decisiones en actitudes conscientes. Que cada día escribas un nuevo y bello argumento para tu vida; que vivas siempre una nueva y apasionante película; que conviertas cada instante de tu existencia en un momento de placer y realización; que no dejes los cambios para mañana. Actúa en el tiempo presente, pues ese es el tiempo más importante de tu película, o mejor, de tu existencia.