Cómo es el estatus psicológico de algunas víctimas de abuso emocional
por Silvia Malamud em STUM WORLDAtualizado em 08/04/2020 11:35:25
Traducción de Teresa
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Muchas de las víctimas de abusadores narcisistas perversos ya vienen con cierto historial de padres que también han tenido comportamientos abusivos.
En proceso terapéutico descubren que, las más de las veces, para poder tener un mínimo de acceso a ellos, tuvieron que cumplir un papel inverso en sus tramas relacionales de desarrollo, teniendo que funcionar como madres y padres de sus propios progenitores. Son hijos que desde el comienzo de sus vidas estuvieron predestinados a acoger a padres narcisistas, necesitados de atención continuada. Tratando de poder sobrevivir emocionalmente, todo el tiempo permanecían ansiosos intentando agradarlos, a fin de recibir un poco de afecto.
El problema mayor de tales niños es que han crecido sin ser reconocidos en sus propias necesidades y deseos, porque desde muy temprana edad aprendieron que lo único que importa son las necesidades y deseos de esos magnánimos padres.
Por tanto, se han desarrollado en un súper reconocimiento empático sobre los estados de humor de ellos, en detrimento de los suyos propios, hasta que con el tiempo amplían ese tipo de percepción al resto del mundo, continuando sin tener en cuenta sus propios humores y sensaciones, pero especializándose en satisfacer a otros en sus infinitas demandas.
De pequeñas, estas personas, al demostrar cualquier espontaneidad o necesidad, sus cuidadores de inmediato pasaban a criticarlas, ridiculizándolas y agobiándolas con sentimientos de vergüenza, mezclados con la sensación de ser inadecuadas y rechazadas. Un lavado cerebral a quien siquiera tuvo oportunidad para desarrollarse. Erróneamente, aprenden que sus padres son el único 'yo' significativo, a quien deben satisfacer y que, si osasen no corresponder a eso, ellas mismas no tendrían existencia. Un grave engaño que la relación abusiva precoz con personalidades narcisistas perversas suele promover. En el futuro, esa percepción distorsionada es proyectada en acompañantes, parejas, ambiente de trabajo, etc.
El telón de fondo de esos niños y de esos adultos cuando crecen es el miedo al abandono, al rechazo y a ser ridiculizados, pero peor aún es la sensación desesperante de no tener significado alguno si no son competentes intermediarios en los significados y deseos de otros. Mientras vivan en esa creencia irracional de que la validación de sus existencias está en la satisfacción de las exigencias de los demás, correrán el riesgo de ser la presa más fácil para los más insanos y los más perversos tipos de abusadores. Mientras no despierten fortaleciendo sus propios deseos y límites personales, fácilmente se verán envueltos en relaciones tóxicas.
Con el transcurso del tiempo, aparte del miedo de no tener a otro como referencia, tales víctimas entran en contacto con un vacío existencial inexorable, e incluso cuando no están en ninguna relación, no pocas veces necesitan auxilio terapéutico para que el encuentro consigo mismo, con su verdadero self, pueda producirse.
Para tales personas, entrando en proceso terapéutico competente, es extremadamente liberador iniciarse en la auto-validación y placer personal legítimos; son momentos preciosos cuando empiezan a sentir que están naciendo por primera vez en sus vidas. El salto mayor, no obstante, ocurre cuando se perciben completas en sí mismas, dueñas de sus propias historias, caminos, deseos y elecciones.
Cuanto más despiertos, mejor.