Consejos para estar aquí y ahora totalmente lúcido
por Silvia Malamud em STUM WORLDAtualizado em 22/03/2007 15:50:13
Traducción de Teresa - [email protected]
Preguntas para hacernos constantemente:
Estos son ejercicios aparentemente sencillos, que han de hacerse al principio de modo continuado, hasta que la presencia, la percepción del sentido expuesto se torne una constante. Otro punto importante a comentar es que los ejercicios que perfeccionan la cualidad de nuestra presencia consciente en nuestras vidas requieren persistencia. Cualquier modificación de patrón requiere un esfuerzo inicial; hazlo entonces de modo suave y con placer. Encara este tipo de movimientos como un ejercicio de lucidez escogido por ti en la aventura de la jornada de tu conciencia aquí en el planeta Tierra. Si haces los ejercicios de modo ligero, pero comprometido, verás que todos tus procesos se verán acelerados. Además de todo lo expuesto, y no menos importante, fíjate en que te tornas cada vez más conocedor de ti mismo y serás incitado a modificar para mejor el contexto de situaciones que no te agradan, al mismo tiempo que también te beneficiarás al sentir con más intensidad lugares tuyos que ya son reconocidamente buenos.
En resumen, si optas por hacer estos ejercicios, prepárate para vivenciar infinitas posibilidades de una orquesta en la que tú eres el director.
1)¿Qué significa esta escena/contexto?
-En el momento en que estés experimentando una situación, detente por un momento, observa la escena que estás vivenciando y pregúntate cuál es el significado que tiene para ti. Sal de la lógica inmediata e inspecciona qué envuelve el segmento por ti delineado. Todo lo que se hace puede servir de ejemplo: - Si estás viendo un paisaje, pregúntate qué significa este paisaje para ti, sal del lugar común. Percibe con mayor nitidez lo que estás sintiendo y qué puede estar simbolizando por dentro tal vivencia. Si estás en contacto, conversando con otras personas, si estás dirigiéndote al cine, etc., todo y cualquier segmento de tu día es susceptible de este cuestionamiento. Pregúntate sin críticas o enjuiciamiento, y deja que venga lo que tenga que venir. Mira si estás cómodo en la experiencia/segmento que estás vivenciando.
2)¿Quién eres tú?
-¿Por qué estás conmigo en esta escena? ¿Qué significas para mí, qué representas y por qué? Mis sensaciones para contigo tienen que ver con la representación que tú tienes para mí o/y tienen significado de realidad concreta con aquello que tú realmente estimulas?
3)¿Qué estoy haciendo aquí? ¿Por qué?
-¿Tiene sentido para mí el estar aquí? Por qué; y dependiendo de la respuesta, pregúntate cuál es tu deseo genuino. Fíjate en que no pocas son las veces en que las personas están haciendo cosas que ni siquiera tienen la obligación de hacer y no se dan cuenta de que están insatisfechas, actúan por hábito, aunque infelices. Si percibes que estás en ese caso en algunos de los segmentos de tu día... ¡despierta! A partir de esta percepción estarás apto para tomar las riendas de tu vida y decidir con mayor claridad lo que de hecho es bueno para ti.
4)¿ En cuál tiempo estoy?
-Esta es una pregunta capciosa y requiere más atención. Por más increíble que pueda parecer, podemos estar vivenciando una situación en medio de un todo emocional, impulsos, sentimientos, pensamientos y, si nos cuestionamos, por veces podremos sorprendernos al percibir que, o estamos exagerando en todo, o inhibiéndonos. Si estás con tu mente abierta, esta pregunta podrá conducirte a recuerdos tuyos en situaciones pasadas y que, sin que te des cuenta, haces asociaciones y reaccionas de modo semejante en el acontecimiento actual. Entonces percibes que tu acción está situada, por ejemplo, diez años atrás... O bien, ampliando todavía más, puedes incluso pensar que estás en un tiempo futuro tuyo, respondiendo al acontecimiento tal como si ya hubieses conquistado o perdido algo. La gran cuestión, sin embargo, es que los tiempos están todos entrelazados, y en ellos presente, pasado y futuro forman parte de una misma trama emocional. La clave es que asocies las imágenes y simultáneamente percibas el status emocional evocado.
5)¿ Estoy físicamente en este lugar? ¿A qué distancia estoy en franjas? ¿Cuál es la calidad de mi presencia en este lugar?
-Estas son preguntas aparentemente sin sentido para un observador que tiene costumbre de no estar “físicamente” en los lugares donde tiene experiencias. Tú debes estar preguntándote cómo esto puede ocurrir, indagando todavía si estás o no en el lugar... Pero dentro de este tipo de cuestionamientos, verás que las cosas no funcionan organizadas por esta clase de pensamientos. Todos nosotros en algún momento ya hemos pasado por esto que voy a exponer ahora: Tú estás participando de un evento cualquiera o de una conversación y repentinamente te imaginas en una playa, tomando agua de coco. Entonces percibes que has dejado de escuchar y de participar en la escena que supuestamente tú estarías vivenciando de modo físico. Si avanzamos por teorías de la física cuántica, es sabido que encendemos y apagamos (estamos parpadeando) millones de veces por segundo; puede ser que en estos segundos estemos de hecho físicamente vivenciando otras situaciones en otras realidades, pero esto no tenemos cómo demostrarlo. Podemos ir más allá y cuestionar si la visión de la estancia en la playa es imaginación o acceso. No importa, esto ha sido solamente una pizca de suposiciones trascendentes basadas, como ya se ha dicho, en la física cuántica. Lo que importa, sin embargo, es la pregunta acerca de cuánto no estamos presentes en la situación, y después una pregunta subyacente... ¿Por qué? ¿Puede ser que la situación está mala para mí? ¿Puede ser que yo tenga un vicio emocional de distanciarme siempre de mis experiencias de vida? Y si se trata de esto, valen más preguntas al respecto, recordando que todas las preguntas formuladas en este breve ejercicio se retroalimentan, es decir, no existe una secuencia jerárquica para los cuestionamientos.
6); A partir de las respuestas obtenidas, cuestiónate: ¿Qué deseo hacer ahora? Habilítate a desempeñarte con lo mejor de ti. La sugestión es que estos cuestionamientos se realicen mientras estamos “despiertos”, pero también pueden funcionar de modo más amplio si los haces antes de irte a dormir, con la intención de despertar en tus sueños, o como se suele decir, para tener sueños lúcidos en los que puedes actuar deliberadamente.
Hazlos varias veces al día, para que los cuestionamientos pasen a ser un hábito de lucidez.