El poder de la palabra
por WebMaster em STUM WORLDAtualizado em 21/10/2018 09:35:36
Autor JOÃO LUIZ SPOSITO
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Traducción de Teresa
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Hace mucho que conocemos el viejo dicho: "la palabra tiene poder" y sabemos cuán fuerte es en nuestras vidas, porque todas las palabras ejercen influencia en nuestra mente. Las vibraciones de nuestra mente se juntan a otras vibraciones semejantes, que provienen de otras mentes y forman un agrupamiento de vibraciones, el cual, a su vez, se materializa en hechos, en eventos en el mundo físico.
Empleando con frecuencia palabras alegres, positivas, optimistas, por sincronía hechos y eventos alegres y positivos surgirán, del mismo modo que empleando palabras ásperas, groseras, derrotistas, negativas, se producirán hechos y eventos compatibles vibracionalmente.
La realidad física en que vivimos es plasmada por las vibraciones colectivas a cada fracción de segundo, que se originan a partir del pensamiento colectivo, el cual, al convertirse en palabra (hablada y escrita) se potencia muchas veces y empieza a moldear su forma en el mundo físico.
Por la repetición constante de tales palabras se producen estas manifestaciones; por cierto, hay un refrán que dice: "Una mentira, repetida mil veces como verdad, se convierte en verdad", esto es como un vaso de agua bajo un grifo que gotea; recibiendo gota a gota de manera continua, inevitablemente el vaso se desbordará.
Hemos de ser conscientes del poder que desencadenamos al repetir continuamente las palabras, ya que eso genera un patrón de fuerza creadora; debemos reflexionar sobre la calidad de las palabras que pronunciamos y escribimos.
En Oriente es común desde hace milenios la práctica de pronunciar mantras, a ejemplo de los monjes, budistas y taoístas entre otros.
¿Y eso por qué? Bueno, los mantras son sonidos sagrados, son palabras que pronunciadas repetidamente desencadenan vibraciones compatibles para alcanzar un determinado objetivo, en el caso de los monjes, crear un ambiente vibracional compatible con el objetivo de la meditación.
Reflexionemos si por casualidad nosotros mismos o personas cercanas que conocemos pueden estar practicando repeticiones sistemáticas de palabras negativas, incluso inconscientes, y produciendo efectos semejantes a los de un mantra en sus realidades, si bien claramente negativos según la naturaleza de las palabras pronunciadas.
Da lo mismo si hacemos estas repeticiones consciente o inconscientemente, el universo vibracional en que estamos inseridos responde de la misma forma.
Ya nos lo dijo el divino maestro Jesús:
"Luego llamó a la gente y les dijo: "Oíd y entended. No es lo que entra en la boca lo que contamina al hombre; sino lo que sale de la boca, eso es lo que contamina al hombre (Mateo, 15)
Hemos de despertar para esta realidad vibracional; el tiempo de la ignorancia está llegando a su fin, la humanidad ya no puede continuar siendo un pez dentro de un acuario, un pez que no sabe siquiera que está dentro de un acuario; eso es activar la expansión de la consciencia y una vez activada esta expansión, ya no cesará de expandirse, ni tampoco podrá retroceder.
Tenemos que tomar conciencia y ayudar a otros a tomarla, modificar la calidad de las palabras que pronunciamos; si colectivamente una gran mayoría de personas consigue educarse para esa práctica, cambiando la polaridad, imaginad el nivel de transformación que alcanzaremos como humanidad.
Aunque esté hablando de colectividad, advierto de que la colectividad comienza en tu individualidad, haz tu parte, orienta a quien lo necesite, y deja, que el movimiento por sí solo se impulsará, al igual que cuando tiramos una piedrecita a un lago tranquilo, las ondas se propagan por todo el lago alcanzando todas las orillas, entonces imaginad si muchas personas tiran sus piedrecitas.
Palabras alegres, optimistas, de salud, paz, concordia, unión y amor llegarán a formar un campo de fuerza a nuestro alrededor, que se ensanchará y conectará a los campos de fuerza de nuestros hermanos en la misma sintonía y formaremos una inmensa red de comunicación energética, vibracional, que atravesará barreras geográficas, culturales, lingüísticas, planetarias, en fin, todo y todos los que estén en la misma vibración serán beneficiados, crearemos una nueva realidad.
Sed felices, pronunciando palabras de poder positivo todos los días y vayamos juntos a transformar nuestro mundo.
João Sposito - Brasilia - DF
Octubre 2018