En un abrir y cerrar de ojos...
por Rubia A. Dantés em STUM WORLDAtualizado em 26/08/2006 10:03:17
Traducción de Teresa - [email protected]
Hoy he despertado sintiéndome tan bien... una sensación de plenitud... de no necesitar de nada... era tan sólo un estar bien...
Pero en seguida ya iba en busca de cosas que podrían sacarme de ese estado... la mente rebuscaba allá en el fondo a ver si conseguía algo que me hiciese preocuparme...
Los pensamientos venían... y casi me llevaban con ellos sabe Dios a dónde...
Eh... calma ahí... dije...tú no vas a traerme cosas que me saquen de este estado bueno de Ser que estoy sintiendo...
Aparté la mente y me quedé sólo con el sentir... percibí como el estar sintiéndome tan bien no requiere nada... y es bueno justamente por esto... es sencillo... te quedas vacía de pensamientos y cosas, y solamente disfrutas de estar viva... Sencillo ¿no?
Sería sencillo si no estuviésemos tan acostumbrados a los dramas y problemas sin fin...
Por qué será que complicamos tanto, siempre volviendo la mente hacia las preocupaciones y problemas... y problemas... y casi nunca nos conectamos a las soluciones...
Nos enfocamos tanto en los problemas que... a cada nuevo pensamiento añadimos más detalles y matices que los vuelven cada vez mayores y más asustadores...
No es que ellos no existan, el mayor problema es que, aun cuando no podemos hacer nada para resolverlos, ellos insisten en hacerse presentes... rellenando nuestra mente... o mejor, atiborrándola y perjudicando nuestro día, casi no dejando espacio para el sentirse bien... y con esto nos alejan cada vez más de la posibilidad de resolverlos...
Y es que con la mente sobrecargada se hace realmente difícil encontrar soluciones...
Si nos acordásemos de que es bastante mejor acceder a soluciones que buscarlas racionalmente, seguramente daríamos más silencio a nuestros pensamientos...
En el silencio nos llegan insights preciosos, como soluciones sencillas y casi mágicas para problemas aparentemente intrincadísimos.
En realidad, los problemas hasta pueden no ser tan complicados... nosotros los hacemos así al colocarlos cada vez más distantes de las soluciones, cuando les damos un valor enorme, ayudados por nuestra mente supercreativa... a cada pensamiento un detalle más que los va haciendo cada vez mayores...
Y cuando no está a nuestro alcance resolverlos en aquel momento, esto solamente nos hace perder el presente, pensando en el futuro. Si al final del día recordásemos todo cuanto hemos pensado y que nos ha preocupado, veríamos que muy poco de todo aquello era realmente provechoso y necesario para nuestro día...
Parece que nos alejamos tanto de estos estados de felicidad, que hasta hemos olvidado los caminos que conducen a ellos... y cuando ellos se manifiestan así... de la nada... casi corremos el riesgo de apartarlos porque ya estamos tan acostumbrados a llenar la mente con millones de cosas innecesarias e inútiles que... lo que es natural y sencillo acabó por volverse difícil y ha pasado a ser una meta a ser alcanzada a través de un largo trabajo...
Bueno... pero ya está bien de hablar de problemas... al fin y al cabo es bastante mejor permanecer en este estado de bienestar... cuando llega así... de la nada.
En este estado es cuando llegan cosas que pueden cambiar completamente el rumbo de nuestras vidas... y de este modo hacer que todos aquellos problemas desaparezcan, así, en un abrir y cerrar de ojos...