ESPECIAL STUM: La Voz del Silencio
por Sergio Scabia em STUM WORLDAtualizado em 16/04/2009 13:04:09
Traducción de Teresa - [email protected]
Siempre pasa lo mismo... Ya no se puede llamar conspiración, pues se ha vuelto norma. Primero ha sido el amigo Zé que, al entrar en mi casa, me pidió gentilmente que desconectase la inofensiva radio, que esparce por aquí música ambiental en volumen muy, muy bajo. Después vino Deborah, quien me ha enviado por e-mail un vídeo de youtube sobre el tema “silencio”. Hoy ha sido Sandra, quien me ha contado un acontecimiento raro: en la cola de Correos se encontró, después de años, a una conocida, persona sorda y muda, con la cual se comunicó sin palabras, por lectura labial… algo que aún no había hecho antes… y que yo visualicé como si hubiese estado allí con ella, abriendo una profunda sonrisa en los labios, que me ha vuelto ahora al teclear.
La guinda sobre el pastel llegó mientras me afeitaba, cuando surgió fuerte en mi mente la frase italiana que decía claramente: La voce del silenzio… Soy cabezota, pero enseguida se ha hecho evidente, frente al espejo, el tema del especial. Espero no cansar al lector con estas observaciones que normalmente pongo al comienzo del texto, pero me parece relevante transmitir cómo se suceden las sincronías cuando estamos receptivos y observamos lo que ocurre, presentándose siempre de forma simple y suave en nuestro entorno. Es precioso verificar que nunca estamos aislados, siendo que todos formamos parte de la poderosa tela de energía que amorosamente nos envuelve y nos coloca en el lugar adecuado, en el momento oportuno, para, de alguna forma, pasar adelante un mensaje guay, que alimente más y más nuestra alma.
Bueno, rápida búsqueda en google y llegó en menos de un segundo este vídeo... por la voz de Andrea Bocelli con la lindísima región de la Toscana al fondo. La música me estremeció todo el cuerpo, aunque, al principio, me hubiese parecido una sencilla canción de amor, una más, hablando de añoranza o de pérdida. Pero sentí con claridad que no era esto lo que ella me transmitía. Siempre, desde que el mundo es mundo, los poetas y los músicos en sintonía con las esferas superiores han logrado conmover a las personas más sensibles y despiertas driblando las censuras y las normas oscurantistas de los poderosos, de los patrulleros de guardia… ¡E Italia todavía sufre amplias influencias nocivas en este sentido, venidas puntualmente de Roma!
Fue muy sencillo: bastó cambiar la palabra “amor” por “mi Alma” y todo empezó a formar más y más sentido. Y – en silencio sagrado – he agradecido profundamente.
reparo en que el silencio
tiene el rostro de las cosas
que has perdido
y yo te siento amor
te siento en mi corazón,
estás retomando el lugar que
tú no habías perdido nunca
Es así como en las palabras, tan íntima y profundamente cantadas por Andrea Bocelli, se procesa, finalmente, el fin de la búsqueda en el mundo exterior, el reencuentro con la esencia inmortal que en nosotros habita, tras larga y estéril andadura por el mundo de la ilusión, con sus luces de brillo tan intenso que llegan a quemarnos por fuera, con sus ruidos perturbadores que aturden, hipnotizan y entorpecen nuestro centro, que desde siempre pide paciente y ardorosamente salir de la sombra, ser reconocido y escuchado, allá donde el estridente sonido de la calle, de los cláxones, de las campanas ya lo logra llegar… en el encuentro definitivo con la Fuente, lo que algunos sabios llaman el vacío creador que a todo contiene.
Qué maravilloso es tener el don de comunicar las grandes verdades de la vida por la voz tan melodiosa y por la música – el lenguaje universal –, la vibración que alcanza al más cerrado de los corazones… en cada nota suave transmitiendo el mensaje del amor… gota tras gota por fin horadando la más endurecida coraza.
El universo trabaja así, con infinita paciencia, relevando nuestros errores, nuestras omisiones, nuestra apatía y el temor a enfrentar los desafíos de la marcha…
Se pueden percibir, mirando hacia atrás, los pasos dados hasta aquí, lo mucho que ya nos hemos equivocado, cuánto hemos dejado que desear, sin por ello incurrir en punición o reprimenda alguna.
Hemos tenido nuestras clases de experimentación e incontables probaciones que salvar, pero quien nos puso en la contienda nos ha entregado las herramientas y los instrumentos para pasar de fase… hemos aprendido que es indispensable salir de la sombra o del falso brillo exterior y mirar hacia dentro, para abrazar nuevamente nuestra Alma, la cual “no habíamos perdido nunca”.
Vamos a rehacer juntos el descubrimiento que la letra de las canciones nos sugiere y poner entusiasmo y movimientos de amor en nuestra vida… volver a sentir sin que sea preciso ver u oír, simplemente captando el mensaje que viene de dentro, de nuestras entrañas; mensaje éste que libera, conforta, ampara y protege.
Busquemos en nuestro centro el mapa original de nuestra misión, las informaciones grabadas profundamente en nuestro banco de datos, que nos conducen, a todos, pues todos estamos aquí con un propósito único y muy claro, para concretizar, en fin, la obra de la Unidad, de la Paz interior que nos hermana definitivamente, que nos quita de la incertidumbre, de la mismidad y de la ignorancia.
Busquemos la realización suave y verdadera, que se sobrepone al desmán, a la injusticia, a la corrupción que vemos allá afuera, pero que forma parte del mundo de maya.
Es ilusión, forma parte del proceso de depuración de la cizaña y del trigo; juego – pero no yugo – puesto que solamente participan de esta balada inconsecuente los que no han comprendido el mensaje de la canción y que – podrá tardar, pero llegarán allá también – no han logrado la inmersión en el “mar del silencio”, los que todavía no saben lo perdida y hambrienta que está su alma. Pese a la ilusión en que están inmersos, son unos con el todo y sabrán en el momento apropiado retornar a la convivencia con la Luz, con el amor incondicional que todo lo remedia y cura, el bálsamo definitivo, absoluto.Somos uno solo y cada día nos dedicamos más y más al servicio de la compasión, siempre disponibles y amorosamente guiados y amparados.
La vida es un juego deslumbrante, justo y perfecto. No hay más que una regla y ésta es simple: solo hay que poner amor en todo.
No hay vencedores o vencidos, pues no se trata de una férrea competición más, de esta dimensión terrena, y lo que importa es alcanzar una vibración que liberta, fascina, encanta y congrega.
El tiempo, aquí en este ruedo, no cuenta, es superfluo.
Lo que vale es la transformación de nuestra Alma, que nos haga sumergirnos nuevamente en el mar de Luz que portamos desde siempre en nuestro pecho…
¿Vamos, juntos, a respirar el silencio, a entrar de una vez en la onda melodiosa que el amor proporciona? ¿Vamos a hacer nuestra parte, dando nuestro ejemplo, siendo mensajeros de la esperanza y de la Paz?
Escribe Izabel Telles: “La intención mueve montañas, las puertas están abiertas y la oportunidad llama a nuestra Casa invitando a todos al gran salto de fe”.
Lo siento mucho – Yo te amo – Muchas gracias.
¡Somos Todos Uno solo!
