Inesperado
por Saul Brandalise Jr. em STUM WORLDAtualizado em 10/01/2010 11:43:39
Traducción de Teresa - [email protected]
Si tú no cuentas con lo inesperado, jamás estarás preparado para cuando se presente... Alguien muy competente en entender la vida, en cómo vivirla y disfrutarla ha escrito eso. Confieso que me gustaría haber sido yo... Pero no lo fui.
No contar con lo inesperado es aceptar que la coincidencia existe.
No contar con lo inesperado es considerar que las personas llegan hasta nosotros por obra de la casualidad.
No contar con lo inesperado e imaginar que las mejores cosas de la vida son obra de un gran arquitecto y que nosotros jamás somos merecedores, es pura miopía cósmica.
No contar con lo inesperado es, por tanto, una nítida demostración de que no conseguimos leer, entender e interpretar la vida. Y todo lo que pasamos tiene que ver con alguien, con eventos pintorescos y nunca sobre el hecho de que somos causa y efecto de nuestras cosechas.
Así, hemos de darnos cuenta efectivamente de que somos ahora lo que hemos decidido ser hasta el segundo anterior en que vivimos.
Nuestra vida no es una caja de sorpresas. En efecto, ella está formada de elecciones que nacen en nuestros pensamientos y después se concretizan en nuestras verbalizaciones y actitudes.
Nuestro pensamiento es una verdadera flecha disparada... Ésta alcanzará el blanco y muchas veces este blanco tiene la forma de algo inesperado.
Después de que he aceptado esta verdad, he notado que todo tiene una razón de ser. Que las personas que han llegado inesperadamente días atrás... Bueno, yo había pensado y hablado sobre ellas.
Que el lugar a donde yo siempre he querido ir, acabé por conocerlo, porque la energía de mi pensamiento me encaminó allí. Que los milagros existen porque nosotros los construimos. En realidad, ningún milagro ocurre sin que hagamos nuestra parte.
Cuando oramos, no importa la forma, estamos construyendo una energía muy fuerte. Después no falta más que dar algunos pasos en el sentido de la petición, y las cosas acaban por suceder. Ahora bien, solamente orando, sin encaminar el pensamiento, nada ocurre.
Cuando descubrí que cualquier música es un mantra, procuré trabajar escuchando una composición calma y serena. Hay una diferencia considerable entre ruido y música. Al igual que hay una diferencia enorme entre lo que llamamos coincidencia, inesperado, casualidad y ley de retorno.
Nada, absolutamente nada en nuestra vida es obra de lo inesperado. Todo tiene una razón de ser. Saber comprender esto es lo mismo que estar preparado para leer las señales de la vida. Cada persona que llega a nosotros trae un mensaje que ha de ser descifrado y comprendido. Como mínimo, son profesores de cómo no se debe hacer. En el momento en que alguien llega, puede ser incluso un mensaje avisando sutilmente de que tenemos que dejar de hacer lo que estábamos haciendo, porque el resultado podría ser tremendamente negativo.
Es preciso sustituir la interpretación de la palabra inesperado por señal. Hemos de darnos cuenta de que la vida es elegir. Yo he elegido y elijo ser lo que soy. Si pretendo construir algo nuevo en mi vida, tengo la obligación de hacer aquello que nunca he hecho. Así es como viene lo inesperado.
Sé que nos veremos.
Beso en el alma
