La elección
por Elisabeth Cavalcante em STUM WORLDAtualizado em 08/09/2010 10:30:14
Traducción de Silvana Partucci - [email protected]
Hay momentos en la vida en que nos sentimos en un callejón sin salida y, por más que deseemos, no conseguimos vislumbrar cual es el mejor camino a seguir o la elección más acertada.
Permanecemos paralizados a la espera de que un milagro suceda, o que alguien nos indique la solución ideal, aquella que nos librará de cualquier mala consecuencia.
Es esencial entender que cualquier elección tendrá un precio a ser pagado. Muchas veces, éste es bastante suave, pero otras, será más elevado. Resta saber si estamos dispuestos a pagarlo, sin restricciones.
Éste es, además, el principal atributo de la madurez, elegir el camino señalado por nuestro corazón, y disponerse a arcar con las consecuencias, sean lo que sea.
Y de nada sirve querer transferir la responsabilidad de nuestras decisiones a otra persona, pues ellas son individuales e intransferibles.
En este momento, es útil recordar que ninguna elección es definitiva, pues la vida es cambio permanente y, ciertamente, nos dará la chance de cambiar la ruta si así lo deseamos.
Por más que ansiemos una respuesta totalmente segura, ella solo vendrá a partir de nuestra propia experiencia. Y ciertamente nos enseñará lecciones definitivas, que serán válidas para toda la vida.
Confiar, antes que todo, en nuestra intuición, y abandonar cualquier tipo de miedo, es el camino más seguro para que hagamos elecciones maduras y concientes.
Me gustaría que largases tus problemas, renuncies a tus problemas.
…Y si puedes desistir de tus problemas, el camino hacia la alegría será abierto. Y si tu consigues abandonar tus problemas, percibirás que aquello que pensabas que era un problema nada más era una ilusión. Y tus problemas no te estaban agarrando, tú estabas agarrándolos. Pero una vez que los dejes ir, sabrás entonces quién estaba prendiendo a quién.
Comprende una cosa más: fue de afuera que agarraste tus dolores y los trajiste para dentro de ti. Por favor, vuelve con ellas para el lado de afuera. El dolor no es interno, todos los dolores son traídos del lado de afuera.
Cuando naciste, cuál era tu naturaleza de tu ser? No había dolor: el dolor fue traído desde afuera. Si un hombre te maltrató y te hizo infeliz, el maltrato fue traído de afuera. Ahora, tú irás a acumular ese dolor del lado de adentro, dejarás que éste crezca, irás a reprimirlo, así se expandirá y envenenará toda y cualquier célula de tu cuerpo.
…Traes el dolor de afuera. Él no está en tu naturaleza. Es por eso que te digo que puedes librarte del dolor. No consigues librarte de la naturaleza, de aquello que es la fuete del sentir. Puedes librarte apenas de aquello que no es tuyo. No hay manera de librarse de aquello que es tuyo.
La alegría está dentro. Nadie la trae de afuera. Ella no viene de afuera, ella es tu naturaleza, ella eres tú. Ella está escondida dentro, ella es tu alma. Si tiras esas basura que vino de afuera y que se ha acumulado, entonces, el alma interna comenzará a expandirse, comenzará a crecer. Comienzas a ver su luz y oír su danza, comienzas a sumergirte en la música más interna.
Pero eso solo sucede si te liberas de la basura que modo que el cielo interior pueda establecerse. Entonces, aquel espacio que está escondido dentro puede expandirse.
Se requiere de un poco de coraje y podrás abandonar tu infierno, exactamente como un hombre que se ensució en la calle y vuelve a casa para tomar un bañarse y la suciedad es lavada.
De la misma manera, la meditación es el baño y el dolor es la suciedad. Así como, después del baño, la suciedad fue lavada y te sientes fresco, de la misma forma vislumbrarás, sentirás dentro de ti la felicidad y la alegría que es tu naturaleza.
OSHO - Tradução: Sw.Bodhi Champak -Fonte: revista Osho Times