La felicidad reside en la simplicidad
por Elisabeth Cavalcante em STUM WORLDAtualizado em 19/11/2015 15:54:34
Traducción de Silvana Partucci - [email protected]
El mayor equivoco que podemos cometer en la vida es la comparación. Cuantos padres destruyen, por inconsciencia, la autoestima de sus hijos, al compararlos a otros niños.
Muchos adultos, por tener una autoconfianza débil, intentan compensar esto a través de los hijos y crean expectativas elevadas en cuanto al futuro de ellos. Exigen que siempre se destaquen de los demás y, cuando esto no sucede, vuelcan su frustración a través de críticas y exigencias muchas veces imposibles.
Cada ser humano es único en sus talentos y habilidades. De nada sirve querer actuar en algo para lo cual la naturaleza no nos dotó. Los dones que traemos son nuestros y de nadie más y no son menos valiosos de aquellos presentados por otros seres humanos.
Descubrir el propio potencial y expresarlo en el mundo es una tarea a la cual deberíamos dedicarnos desde temprano. Pero no somos estimulados a esto, a buscar nuestra interioridad.
Al contrario, somos enseñados a mirar hacia fuera y encontrar en el mundo exterior los modelos que debemos seguir. Intentar ajustarse a un modo de ser que es antagónico a su naturaleza es una de las principales causas de angustia e insatisfacción del ser humano.
La sociedad nos hace creer que solo tenemos valor si somos capaces de hechos extraordinarios, que nos lleven a destacarnos a través de la conquista, la fama, el poder y el dinero.
Sin embargo, cuanto más gastamos energía yendo atrás de estas ilusiones, más desperdiciamos la chance de encontrar la realización simplemente expresando nuestro ser.
El amor por si mismo es la forma más autentica de gratitud que se puede ofrecer a la existencia. Sea cual sea la manera que ésta encontró para manifestarse en cada uno, éste es el modo correcto, pues nada en el Universo ocurre sin un propósito.
“Mira para la comunidad de las cosas y descubre lo común: cuanto más común, más verdadero, cuanto más excepcional, más falso. Se ordinario y estarás más cerca del piso, más cerca de la verdad. Si consigues ser absolutamente común ¿qué más será necesario?, pues cada momento se vuelve una gracia tan grande… ¿cuál es el problema en ser absolutamente común?
Comes y comer es un sacramento. Duermes y dormir es un sacramento. Caminas bajo el sol, ¿qué más es necesario? Respiras, ¿qué más precisas para ser feliz? Amas, ¿qué más quieres?.
Todas las cosas ya fueron dadas, solo estás tratando de ser excepcional. Sigue la regla general, lo común, no intentes ser una excepción, si no, estarás en la miseria”. Osho