La Levedad del Cuerpo
por WebMaster em STUM WORLDAtualizado em 16/06/2014 09:15:07
por Wilson Francisco - [email protected]
Traducción de Teresa - [email protected]
Trigueirinho, narrando una experiencia suya dice que en aquel momento el cuerpo pedía únicamente la levedad de las frutas, rehusando cualquier otro tipo de alimento. El cuerpo etérico, entonces, rehusaba aproximación.
Es bueno que conozcas tu cuerpo e identifiques lo que necesita para sobrevivir.
Obsérvate. Ya nos hemos acostumbrado a lidiar con la belleza estética, utilizando perfumes, cremas, masajes, pilates, etc. y tal.
Mi propuesta es que identifiques tu cuerpo como templo sagrado en el que habitas, y más: como herramienta expresiva que puede proporcionarte condiciones para desarrollar tus talentos divinos.
Imagina tener la inteligencia y sensibilidad suficientes para utilizar tu vista. Tener una mirada incontaminada que observa personas y acontecimientos, todo lo que es bueno, sin perder la astucia y la perspicacia de ver lo que hay por detrás de la apariencia. Y más. ¿Has pensado si hicieses inocente tu mirada, eliminando todo impulso de enjuiciamiento, sin dejar de tener una percepción clara de lo que es justo?
Tú que eres menos joven, como yo, ¿te acuerdas del efecto que irradiaba la mirada de nuestro padre? Bastaba una mirada y uno se escapaba corriendo al terrero (no me refiero al de umbanda, yo soy de pueblo, y teníamos un patio que llamábamos así).
Pues bien, hoy mis nietos ni siquiera se dan cuenta de eso, porque están allí pegados a los móviles y a los videojuegos, cosas de este nuestro tiempo maravilloso.
¿Te ha pasado alguna vez sentir en tu cuerpo el efecto de una mirada tierna, cautivadora, iluminada? ¿O congelarte con una mirada fría, metálica, libidinosa?
Una clienta mía vivió años de su vida con cierta sensación de tener en la cara una expresión de mujer fácil, y de que los hombres siempre la miraban abusando.
Descubrimos, tras ciertos procedimientos, el origen de aquel estado alterado que su cuerpo presentaba.
A los siete años iba subiendo la escalera del salón de su casa, cuando notó un escalofrío. Se volvió y vio a su padre mirándola. Mientras relataba esto, lloraba sollozando, sin comprender lo que sucedía.
Se lo expliqué. La mirada de él estaba contaminada, por algún motivo que desconocemos.
El caso es que ella nunca tuvo buena relación con su padre, sin saber nunca el por qué. Llevamos a cabo la reprogramación de ese acontecimiento y ella quedó libre de ese estado mórbido y ya no volvió a tener sobre sí la mirada delictuosa de ningún hombre.
Como se ve, para ti que eres un ser divino y tienes tus compromisos con la vida, tu cuerpo y, en particular, tu mirada, puede ser un instrumento extraordinario.
Ejercita esto, haz inocente tu mirada, cuando despiertes, bendice el agua y lava tus ojos y después afirma:
Dios mío, quiero mirar a las personas y al mundo con los ojos llenos de amor.