Reiki, la fuerza curativa del Universo
por Maria Guida em STUM WORLDAtualizado em 23/03/2006 18:42:36
Traducción de Teresa - [email protected]
Reiki es una palabra japonesa, formada por la unión de otras dos. Rei, significa espíritu, aura. Ki, significa fuerza, energía.
Reiki es la energía del espíritu, la fuerza que da vida a la materia. Energía vital universal, dorada, sagrada, curativa, que está presente en todo lo que existe.
En Oriente cada cultura le da un nombre diferente. En China es denominada Qi, y en la India, Shakti o Prana. En Occidente se conoce como fuerza vital, conciencia cósmica o energía divina.
Reiki es también una técnica de cura natural a través de la imposición de manos, redescubierta a finales del siglo XIX por el Dr. Mikao Usui, un sacerdote cristiano de la Universidad de Oshisha (Japón), en un libro budista tibetano de 2.500 años.
La técnica consiste en canalizar la fuerza vital y transmitirla a través de las manos a los seres, humanos, animales e incluso plantas, que de ella necesiten.
La energía divina pasa del donante al receptor, que absorbe la cantidad que le falta.
Quien administra el Reiki no está donando su propia energía, pero sí sirviendo de canal, para que la conciencia cósmica realice la cura.
Cuando entra en acción, la fuerza vital beneficia tanto al donante cuanto al receptor, propiciando la cura, ampliando la conciencia, amenizando el estrés, desintoxicando el cuerpo físico, limpiando el cuerpo emocional, fortaleciendo la mente, equilibrando los Chakras, promoviendo el crecimiento espiritual, aumentando el poder de observación, la creatividad, la auto-estima, la auto-confianza y el espíritu de sacrificio.
Los conocimientos necesarios para aplicar el Reiki son transmitidos de maestro a discípulo a través de rituales de iniciación.
En la tradición original de Reiki esa iniciación se produce en dos niveles, amén del de maestro.
En el primer nivel, que tiene una duración de hasta dieciséis horas, el alumno recibe cuatro iniciaciones, aprende la parte teórica y la parte práctica, tornándose apto para curarse a sí propio y a todos los seres vivos.
Después de seis meses de práctica, los discípulos pueden recibir las tres iniciaciones del nivel II, aprendiendo también a aplicar el Reiki a distancia.
La condición de maestro es el camino reservado a los discípulos que tienen real vocación para enseñar el Reiki.
