Ser feliz es una elección
por WebMaster em STUM WORLDAtualizado em 12/08/2013 14:02:08
por Vinicius Francis - [email protected]
Traducción de Teresa - [email protected]
Hoy quiero hablar contigo sobre Positividad. Un asunto que voy a tratar en profundidad en nuestro próximo curso de la serie "Hazlo fluir" donde abordaremos la tan soñada Felicidad. Y hoy yo estaba elaborando un tópico en que hablo sobre la cuestión de la positividad. Sí, es esencial ser positivos si nuestro objetivo es ser feliz. Y eso no tiene nada que ver con la situación externa de tu vida, tus disculpas son pretextos tuyos para continuar en el banco de la víctima.
Tú puedes ser rico, pobre, feo o guapo (dentro de los cánones), no importa tu color, tu condición sexual (porque la sexualidad no es opción, sino condición natural del individuo), tu religión, nada de eso importa. Lo que importa es tu elección. Estaba asistiendo a la entrevista de una cantante que me gusta mucho y ésta dijo en ella que ser feliz es una elección.
Y me admiró la postura de esta artista en relación a ese asunto y me dije a mí mismo: Realmente, es verdad. Porque cuando tú eliges ser feliz, no hay quien te haga sentir mal, no hay situación que pueda hundirte. Algo que se elige con fuerza y determinación dentro de nosotros mismos permanece, independiente de cualquier otra cosa.
Cualquier otra cosa ¿has visto? A veces dices que eres feliz, pero basta una "cosita", un pequeño problema que surge, una palabra dicha "atravesada", o sea, con hostilidad, para que tu felicidad baje por el sumidero y caiga en la alcantarilla. Hay quien critica mis jergas, pero tú comprendes lo que quiero decir, ¿no es cierto? La alcantarilla es un lugar, para nosotros los humanos, asqueroso. Y es esa la situación emocional de quienes condicionan su felicidad a algo que está fuera de ellos, ASQUEROSA.
Y cuando eso que he citado antes te ocurre a ti, es señal de que la felicidad no está presente. Puede que lo tengas todo, pero no la felicidad. Es entusiasmo, dependencia y condicionamiento. Por cierto, estos tres son grandes males que afligen al ser humano moderno. Y ni siquiera he citado el apego, a fin de que no sientas miedo de los monstruitos psicológicos que rondan tu vida.
Claro que, aun siendo felices, pasamos por momentos delicados y a veces difíciles. ¿Qué? ¿Te parecía que ser feliz es vivir en un mar de rosas? Esto puede explicar los millones de decepciones que has tenido y tienes constantemente en tu vida. Y yo tampoco quiero entrar en detalles sórdidos al respecto porque si no, salimos del tema.
La Felicidad no tiene nada que ver con una sonrisa constante en el rostro, aunque claro, quien es feliz siempre hará de todo por sonreír. ¿Has grabado esta? No hay nadie que sonría todo el tiempo, a excepción del “Comodín”. Hay momentos en que es preciso que seamos serios, firmes y a veces, dependiendo de la situación, drásticos. Sí, amigo, la vida tiene estas cosas. Para todo hay un tiempo determinado bajo el Sol. Me gusta mucho ese versículo bíblico. Es verdadero.
Ser feliz no es una reacción provocada, eso se llama emoción. Felicidad es un estado elegido voluntariamente. Se produce cuando determinamos que, a pesar de los pesares, vamos a estar Bien. Porque estar Bien es bueno. Y dejémoslo ahí. No hay que tener motivos aquí en la Tierra tales como: Soy feliz porque soy guapo. No, es todo lo contrario, soy guapo porque soy feliz. Porque la gente negativa, no importando su apariencia física, será siempre fea. Todo aquel que niega la verdad y la divinidad de su Yo, que es ser feliz por encima de todo, no puede ser guapo. He filosofado.
No tiene nada que ver con la cuenta gorda en el banco, si bien esto sea, en mi opinión, una de las mejores cosas de la vida. Ser feliz eres tú contigo. Es aceptación de la naturaleza interior, es el bienestar con lo que tú eres, con lo que te gusta hacer. Es una pose frente a todos y al mundo. Es apoyarte, asumirte, darte lo mejor. Esto es ser feliz. Es saber, en cada situación de la vida, extraer siempre lo mejor y tener la capacidad de estar Bien frente a todo.
Y cuando uno adopta esa actitud interior, ¡las cosas en la vida empiezan a cambiar!
¡Verdad! ¡Sí, cambian y para mejor! Claro que, para llegar a ese estado de felicidad hay que darle un repaso al desorden que llevas ahí dentro. Es preciso resolver la cosa de la vanidad, del orgullo, el miedo, los mimos, tú bien sabes lo que hay que arreglar ¿no es cierto?
Entonces, sólo cuando logres cambiar todo eso, será cuando realmente conseguirás ser feliz.
Mantén esa novedad. Sujeta firme, porque si lo haces y comprendes a dónde quiero llegar, podrás cambiar muchas cosas, por no decir TODO.
Mi querido lector (parezco un político), todo está bien y siempre estará bien. Eres tú el que se desestabiliza por poca cosa. Eres tú quien da importancia excesiva y exagerada a los demás, al mundo, y te olvidas de darte fuerza y motivación.
Eres tú, con tu locura mental, quien permaneces atormentándote por nada.
Aún no ha ocurrido nada y tú ya estás ahí, martilleando, martilleando y martilleando a ti mismo sin misericordia.
¡Sal de esa! No te lo tomes tan en serio, sonríe más. ¡Medita! Respétate a ti mismo. Deja de hacer teatro, de esconderte detrás de tu vanidad monstruosa para parecer lo que no eres, pues todo eso está TRABANDO tu vida. Me gusta el lenguaje claro. Sé natural, sé de la manera que eres. ¿Que a los demás no les gusta? Que se fastidien, lo que importa eres tú. Ah, ¿él (o ella) no te aprueba? Bah, entrégalo a Dios y vete a ser tú, ¡pues sólo siendo quien tú eres hallarás la forma de ser feliz! Festival de “tú”.
Pero lo has comprendido, ¿verdad? Hoy, sal de casa, si puedes, arréglate el cabello, hazte el loco(a), suelta las amarras y cae en brazos de la Vida, que sólo tiene lo mejor para aquellos que con lo mejor de sí mismos se premian. Y yo termino aquí.
Sé feliz.
Vinícius Francis