Sobre nuestras dificultades
por WebMaster em STUM WORLDAtualizado em 16/02/2017 13:39:23
Autor Waan Oliver
[email protected]
Traducción de Teresa
[email protected]
Es horrible encontrarte en un lugar donde no quieres estar, sin que puedas salir de ese lugar. Estás en una triste situación, preso, tu deseo es tirar todo por la borda y simplemente no puedes, porque tienes N cosas que acaban sujetándote a aquel lugar.
Haya paciencia y sabiduría para lidiar con todo eso. Haya amor hacia ti y hacia los demás, para no salir enloquecido, arrojando nuestra basura sobre quien no tiene nada que ver. Haya foco en el afecto, foco en el bien, foco en la luz.
Porque, lo queramos o no, esas situaciones forman parte de nuestro aprendizaje, lo queramos o no, aún tenemos cierta sintonía con esa energía "desagradable". Yo sé que es difícil de admitir que de alguna forma somos iguales a quién no nos gustaría ser.
Lo queramos o no, esa es incluso una forma para que trabajemos muchas cosas que están todavía adormecidas en nosotros, muchos sentimientos que no han sido despertados, o que estaban camuflados de buenas obras. Como dice el refrán: En el momento de la ira es cuando vemos quién la persona realmente es.
¿Qué tipo de persona tú estás siendo en el momento de la ira? ¿Qué tipo de persona estás siendo cuando algo no te agrada? ¿Qué tipo de persona estás siendo cuando escuchas un no, principalmente un no por parte de la vida?
No voy a decirle a nadie que intente tranquilizarse, porque sé que es difícil. Uno tiene ganas de mandar todo a paseo, pero lo mejor que puedes hacer por ti mismo e incluso por los demás es permanecer en silencio. ¡Acógete! De nada te servirá salir protestando, insultando.
¿Dónde estás tú cuando más te necesitas? Cuando las cosas van viento en popa, cuando todo sale bien, perfecto, lógicamente es fácil permanecer enfocado en el bien, en la luz, en el afecto. Ahora bien, cuando nada va bien, ¿qué es lo que tú haces? Acabas por descentrarte, por caer en la ira, en el estrés. Y ¿quién acaba peor con todo eso? ¡Tú! Quien siempre sale peor parado somos nosotros. Nosotros somos los que nos estropeamos por culpa de lo externo.
Intenta comprender lo que la vida te está indicando con eso, qué es lo que tú necesitas trabajar más en ti. Estoy seguro de que poco a poco van a llegarte las respuestas. Estoy seguro de que vas a aprender a transmutar esas situaciones desagradables en tu vida.
Porque las situaciones desagradables están ahí precisamente para que puedas aprender con ellas.
No seas una tapia en esos momentos. ¡Reflexiona!