¿Te sientes cansado? ¡Entiende por qué!
por WebMaster em STUM WORLDAtualizado em 28/07/2015 05:27:13
por Gisela Campiglia - [email protected]
Traducción de Teresa - [email protected]
Cuando tu coche hace un ruido diferente, vas enseguida a un mecánico para verificar si hay algún problema. Pero cuando tu cuerpo te avisa por medio de un cansancio intenso y frecuente de que hay algo que no va bien, no tratas de averiguar la causa de ese malestar. Hay personas que sólo empiezan a prestar atención a las señales que el cuerpo envía, después de un ingreso hospitalario. Ese no será tu caso, pues la lectura de este artículo te hará ser consciente y estar atento a los síntomas de desequilibrio energético.
Recomiendo emplear el sentido común; si tu trabajo es pesado, si eres un atleta, o comes y duermes muy poco, tu cansancio está justificado. Los problemas físicos, como desequilibrios hormonales, diabetes, anemia, infecciones, fibromialgia, trastornos de la tiroides, enfermedades cardíacas, renales y hepáticas también cursan con fatiga. Estrés, ansiedad, tristeza y depresión tienen como consecuencia la sensación de agotamiento. Me refiero a un tipo de cansancio que no tiene motivo aparente, pero incomoda bastante. El agotamiento energético originado por comportamientos automáticos e inconscientes que drenan nuestra energía.
Dar oídos al cotilleo
Una situación corriente que diluye nuestra energía es dejarnos perturbar por el cotilleo contra nosotros. No gastes tu precioso tiempo dedicando pensamientos negativos a los cotillas de turno. Evita adoptar alguna actitud impulsiva de la que puedas llegar a arrepentirte más tarde. Cuanta más energía despilfarres con esas naderías, más poder ofreces a quienes desean afectarte.
Alimentar resentimientos
Decidir perdonar a aquellas personas que han perdido la oportunidad de hacer un intercambio positivo con nosotros es un acto de inteligencia y amor hacia uno mismo. Mientras esa cuestión no quede resuelta, mantendremos un hilo energético que alimenta una conexión de resentimiento con el ofensor. No se trata de fingir que no ha pasado nada. Es una postura de amor propio y discernimiento, de optar por liberarse de conexiones que nos traen perjuicios energéticos.
Mantener amistades infructíferas
Convivir con personas que se quejan por todo y sólo acuden a ti para contar sus problemas es lo mismo que mantener amistad con vampiros energéticos. Al final de una conversación con una persona así, tú te sientes acabado, y la persona fortalecida. ¡Eso significa que tus buenas energías te han sido robadas!
No terminar lo que empiezas
Trata de terminar todo cuanto te dispongas a hacer. Dejar tareas, relaciones y asuntos pendientes hace que tu energía fluya hacia lo que aún no está concluido. No dejes las cosas para más tarde, especialmente los quehaceres que consideras más fastidiosos. Resuelve enseguida tus cuestiones pendientes, y benefíciate del alivio de la sensación de misión cumplida.
Cultivar el sentimiento de culpa
El sentimiento de culpa también mina nuestra energía; ármate del valor de los humildes y pide disculpas a quien sea necesario, incluso a ti mismo. Libérate de ese pesado fardo que arrastras diariamente, ¡el peso de la culpa!
Actuar esperando algo a cambio
Cuando decidas dar lo mejor de ti, no crees expectativas de retorno, evita desgastar tu energía con posibles frustraciones. Tan sólo haz de corazón lo que te parezca mejor, conténtate con saber que has hecho tu parte.
Te irritas con facilidad
Vivir bufando de rabia sólo atrae más problemas a tu camino. Estar irritado no propicia resultados positivos, emplea esa energía para solucionar lo que te irrita, y no para desgastarte todavía más.