Una estupenda invitación
por Sergio Scabia em STUM WORLDAtualizado em 08/04/2020 11:34:53
Traducción de Teresa - [email protected]
Con el tiempo pasando por nuestra vida como un relámpago, cada vez más aumenta el deseo de transmitir -por medio de la palabra escrita- a tantas personas como sea posible, las cosas que estoy aprendiendo y que ya están en el aire, los descubrimientos esenciales que puedan servir de impulso, sostén y esperanza a los que se encuentran en el Camino del auto-descubrimiento y necesitan de alguna actualización, de alguna iluminación, de algún consejo. Pasar adelante la información que puede ser útil es algo que me estimula y motiva de tal forma que lo considero hoy como la piedra miliar de mi existencia en este mundo aún dividido entre el bien y el mal, donde las grandes religiones no consiguen muchas veces ir más allá de dogmas obsoletos y mandamientos para controlarnos y esclavizarnos y con la ciencia que, ella sola, pretende ser la gran fuente de esclarecimiento para responder a las infinitas dudas de los muchos que buscamos solamente la verdad.
El STUM nació con la finalidad de convertirse en un sitio abierto y serio, que ofrezca innumerables maneras de buscar la verdad de forma directa, por el auto-conocimiento, evitando interferencias e infiltraciones externas que definitivamente nada aportan, cuando no perjudican. El viaje es hacia dentro, es individual e intransferible, tiene como base la Unidad de todo lo que existe, abriendo y manteniendo abiertas las puertas a todos: creyentes de todas las religiones, ateos y todas las personas de buen sentido, de corazón y mente abiertos. Un espacio donde es posible navegar e interactuar con facilidad en un contenido rico y variado, ensanchando las opciones de mirar, dónde mirar, cómo empezar a decodificar el mundo a nuestro alrededor, buceando, penetrando, explorando lo desconocido, las dimensiones sutiles, los varios niveles de realidad por los cuales, de manera más o menos consciente, transitamos diariamente. Sin embargo, las dificultades para describir de forma exhaustiva esos estados aumentan cada vez que nos referimos a los planos menos densos, donde otras leyes, que no las de la tercera dimensión de la Tierra, gobiernan nuestras almas. Pienso que para ti, que frecuentas las páginas del STUM, ciertamente la cosa se hace mucho más fácil y directa, pues ya sabes que basta aprender a mirar definitivamente hacia dentro, siendo la clave de acceso solamente un corazón puro, vibrando amor incondicional.
¿Qué podemos hacer entonces a partir de este momento, una vez iniciado el Viaje interior? Bueno, las herramientas corrientes, aquellas que recurren a los cinco sentidos, ya no nos sirven, y dos poderosos y sofisticados instrumentos pasan a dominar la navegación; se trata de la intuición y la percepción sutil, que es el sentir con el corazón.
Si estamos libres de condicionamientos, obtendremos el acceso definitivo a dimensiones donde el espacio se colapsa (las distancias desaparecen) y el tiempo deja de existir, transformándose en un "eterno ahora". A esos niveles podemos tocar una estrella con un dedo o llevar pasado y futuro hasta esa línea recta, vertical e inamovible: el momento presente.
Sentimos así que estamos desplazando nuestra consciencia, en un viaje mágico, hacia donde queramos en el espacio y/o en el tiempo. Podemos elegir volver para escuchar las parábolas del Maestro Jesús o verificar cómo será dirigida nuestra próxima vida.
En mi opinión, la base más simple y eficiente para realizar ese tipo de viajes es la meditación, la vieja técnica de relajarse, de respirar profundamente, de concentrarse o de visualizar algo específico; o también buscando el silencio, logrando vaciar la mente de forma profunda, estando receptivos y atentos a aquello que el Universo y los Guías nos tengan reservado en ese sorprendente "paseo interactivo multidimensional".
Cuando al fin se termine la aventura y la consciencia despierta haya asimilado y grabado en nuestro campo las sensaciones vivenciadas con todos los colores y matices. nos convertiremos en el acto en felices Ciudadanos del Universo.
Lo sé, sé que muchos van a pensar que estoy viajando en la mayonesa, pero si lo que estoy escribiendo es locura, deseo ese tipo de locura para todos.
Sí, el punto de mutación puede ocurrir de muchas maneras, por experiencias diversas, todas maravillosas, en las cuales somos el actor principal; en una de ellas nos modificamos en un haz de rayos de sol viajando por el éter en dirección a la Tierra, para entrar en el proceso de fotosíntesis de una planta y transmutarnos en una linda y perfumada flor. a ese nivel lo somos todo: el fotón, la tierra, el polen, el perfume.
Podemos además sentir que somos una "molécula de Dios", un punto de Luz que se separa temporalmente de su origen para iluminar los reinos inferiores, adentrándose en regiones de baja vibración, de sufrimiento e ignorancia profunda. Cual Ángeles, llevamos confortación y mostramos el camino de la redención a los que ya están preparados, guiándolos hacia la Luz.
Y hay también el tiempo en que somos llevados a celebrar, a festejar reencuentros y ciclos que se cierran o proyectos que nacen; y por veces incorporamos la alegría y la gracia de un delfín, nadando felices en aguas claras, acogedoras y amigas en acrobacias increíbles, bellísimas. somos consciencias divinas y despiertas, guiadas por el Amor, somos los co-creadores de nuestra realidad.
En una dimensión somos servidores de Dios, en otra somos también hijos de Él y. finalmente somos Él.
Nada menos que eso. ¡Todos nosotros!
Formamos el Universo. Evolucionamos hasta lo infinito, desarrollamos nuestra consciencia tal como el Universo que se expande sin cesar desde siempre.
Necesitamos sentir por completo lo que representa esta verdad que nos recalifica, descubrir y finalmente asumir nuestra misión preciosa. ¡No puede salir mal! Ya es más que hora. Es preciso actuar, levantar la cabeza y cambiar lo que sea necesario, libertar el Alma de las ataduras que por ventura nos sujeten todavía a situaciones limitadoras; limpiar nuestro campo de energías que no sean nuestras, buscar con coraje y determinación la Luz, la Belleza, la Bienaventuranza. Ya no es posible diferirlo más: ¿por qué no seguir los ejemplos y los legados que el Maestro Jesús y todos los demás Maestros nos dejaron? ¿Qué tal vivir un día entero, o bien una semana, un mes quizá, mirándonos en la vida de Él?
En cada instante, en cada paso dado, en cada palabra proferida, es elección nuestra incorporar la Paz, la Serenidad, la Sabiduría innata, la Paciencia y la Bondad. asumiendo la responsabilidad absoluta por todos nuestros actos, opciones y sentimientos. De repente, podemos aún pairar por encima del Bien y del mal, de la dualidad, de la separación. vibrar la Unidad y el Amor 24 horas por día.Este sea quizá el mejor camino para alcanzar la Iluminación.
Se puede hacer inmediatamente, de la noche para el día, en casa o en el trabajo, suavemente y sin alarde; pues no necesitamos de la aprobación de otros.
Nos hemos convertido en un faro encastillado en roca sólida, localizado en el lugar adecuado esparciendo a los cuatro vientos un haz de Luz que no podrá pasar desapercibido a los navegantes. En poco tiempo nuestra vida ya no será la misma y el mundo en torno a nosotros también reflejará lo importante que es nuestra actitud, nuestro ejemplo.
¿Qué tal iniciar un gran cambio con pequeños, pero firmes movimientos. lo hacemos juntos? ¿Empezamos ahora mismo?
Estoy completamente seguro de que muchos están absolutamente listos y sé que la tarea es posible, compensadora y contagiosa.
Los Guías, los Mentores, los Maestros están a nuestro lado, la sugerencia que se ha dado, de mirarnos en el espejo del Maestro, no es mía, soy un simple intermediario y procuro no interferir tanto en aquello que ha de ser pasado adelante.
¡Deseo éxito y felicidad!
Somos uno con todo, Yo soy el otro Tú. Tú eres el otro Yo.
Que los Servidores de la Luz sean bendecidos.
Doy las gracias aquí a los queridos y pacientes Guías y además a toda la pandilla que permite que este Sitio exista: Rodolfo, Sandra, Teresa, Marcos, Anderson, Ian, Lidiane... ¡ y Tú! Quedo profundamente agradecido a Marcio de Kallipolis por su presencia en mi vida.