Yo y los OVNIS
por Acid em STUM WORLDAtualizado em 07/03/2005 12:30:32
Traducción de Iván Lavilla - [email protected]
Siempre quise ver un disco volador. Oía los relatos de mi madre y de mi abuela, que ya los había0n visto (en los años 70), y vivía mirando el cielo, pero no veía nada. Cuando me mudé de Recife para Acre (dos años) creí que vería muchas cosas, al final, el cielo de allá es maravilloso, donde se puede apreciar toda la extensión de la Vía Láctea. Pero sólo pude ver satélites, con sus rutas a horarios previsibles. Las cosas mejoraron cuando cumplí 18 años y fui a sacar mi licencia de conducir: sólo entonces descubrí que era miope. Con las gafas, pude ver las estrellas menores, que yo ni siquiera percibía. Sólo que, aún así, no veía OVNI alguno...
Pero, todo cambió en agosto de 1999, cuando ocurrió el alineamiento de los planetas en forma de cruz.
Inspirado por el fenómeno (que no podía verse a simple vista), resolví pasar la noche mirando las estrellas y suspirando, con mi típica nostalgia de algo que no sé definir. Cuando dio la 1:30 h de la mañana, estaba jugando con mi perro, y de repente percibo un fuerte brillo titilando en el cielo. Miro y veo que una luz titilaba tres veces seguidas y desaparecía, para titilar tres veces seguidas más en un punto más adelante, y después desaparecer. Mi primera reacción fue pensar que era un helicóptero. Pero había un silencio de matar, y yo estaba a 1 km de la playa y tenía un campo de visión enorme para los lados, y la "cosa" no titiló más! Entusiasmado con mi primer avistamiento, resolví quedarme toda la madrugada. Fue ahí que, en el mismo lugar de donde se había apagado aquella luz, (+ o - encima del litoral) avisté algo que se movía lentamente, con una luz que pulsaba, en vez de simplemente encenderse y apagarse (era como si fuera algo orgánico, en vez de electrónico). La forma más apagada de ella era semejante a un satélite, mientras su forma más fuerte era mayor que cualquier estrella. Una de las veces, al titilar, tomó la forma de un cometa o estrella fugaz, con aquella "cola". Obvio que desperté a todo el mundo en casa! Podía ser una invasión extraterrestre, quién sabe? Ehhehe... Ahí nos quedamos mi madre, su novio, mi hermano menor y yo mirando el cielo. Vimos algo parecido a un satélite, sólo que de color rojo. Yo no sabía, pero esos puntos de luz iban a tornarse mi única compañía en las madrugadas durante los próximos dos años. Pero la noche de avistamientos (la primera y la más espectacular de mi vida) se cerró con lo que sería uno de los más interesantes avistamientos, y el mejor, con tres testigos!
Eran las 4:30 de la mañana de un sábado. Mitad del cielo ya estaba nublado. Fue cuando avisté una enorme luz, semejante a la de un globo. Parecía que estaba pasando como máximo a 100 metros de nosotros, pues no había interferencia atmosférica (común a objetos distantes) y él estaba debajo de las nubes (que estaban bajas). Al pasar a nuestro lado, pudimos calcular la forma. Parecía un carrito de bebé, con un poderoso alerón con una luz amarilla-verdosa, comparable solamente a la de un alerón frontal de avión. Atrás no había luminiscencia: apenas una tenue luz roja pulsaba, pequeña. Se movía lentamente, como un globo, y no emitía sonido alguno (era madrugada y estaba todo en silencio mortal. Ni siquiera corría viento). En toda su trayectoria se movió en línea recta, y no sofrió ningún cimbrón hacia los lados. Entró en las nubes y desapareció en dirección al mar. Fue visible durante unos 3 minutos, en total.
Hice hasta algunos dibujos para no olvidar los detalles:
Obvio que en las madrugadas siguientes estaría despierto para ver más cosas. Y así fue: el domingo de madrugada vi, en lo alto del cielo, una luz bien pequeña y alta, titilando como un avión, sólo que en forma de puro, y solamente la parte trasera tenía una luminosidad mayor. Interesante, pero podría ser un avión. Fue cuando avisté lo que parecía ser una estrella fugaz, con cola y todo. Vino descendiendo por el cielo, sólo que la luz roja paró en pleno aire, e inmediatamente comenzó a seguir en la horizontal, en línea recta, en dirección al mar. Desapareció en las nubes, ofuscado por el sol. Mi mundo se cayó en ese día. Hasta ayer podía tener una explicación un poco más lógica para lo que había visto, pero no para eso!! Ustedes saben lo que es ver una estrella fugaz detenerse en medio del cielo y seguir como un inofensivo puntito de luz, lentamente en dirección al mar? La frase "ellos están entre nosotros" y "disfraz" resonó en mi cabeza días y días...
Como si eso no bastase, el lunes a las 5:00 de la mañana, estaba del lado de fuera de casa, conversando con la vecina (que tenía unos 60 años o más) y su hija, cuando avisté el mismo objeto del sábado, el que parece un globo! Gracias al sol, que ya había salido, pude definir su forma (parecida a la de un huevo, pero un tanto deformado) y ver con nitidez que poseía un "aura verde" a su alrededor, aún de día! Entró en una nube pequeña y (quédense pasmados) no salió del otro lado!!!!! Las personas que estaban conmigo no supieron qué decir. Rieron un poco y se quedaron mudas! No podía decirse que era un globo o un avión militar!
Confieso que enloquecí. En tres días había visto más cosas que lo que deseaba ver en toda mi vida! Pero lo que más me revelaba era la pasividad de las personas ante aquello! Paradigmas que se rompían ante sus propios ojos y la mente de esas personas insistía en negar (o ignorar) lo que habían visto! Me puse eufórico, después paranoico, después deprimido, y después enojado. Entré en crisis existencial, percibí claramente que vivimos en una farsa donde las personas intentan mantener las apariencias de que todo está normal y lo que importa es el pan de cada día.
Después de un tiempo, intentando “despertar” a las personas - intentando hacer que ellas vieran por ellas mismas esas luces (diciendo horario, lugar y todo) y ellas (obviamente) no se interesaban – comencé a dudar de mi salud mental. Será que el mundo está en lo cierto y yo estoy “delirando”? Entonces me endeudé y me compré una filmadora, apenas para probarle a las personas (OK, y a mí mismo) que no estaba loco.
Ahí se da la mayor tomada de pelo intergaláctica que ya haya visto: Hasta entonces estaba avistando cosas increíbles (del tipo "este es de hecho un OVNI"), por lo menos una vez por semana. Pero, el día que compré la filmadora (y durante el resto de los días), sólo aparecieron lucecitas para allá y para acá. No preciso decir que me deprimí más todavía. Mi familia, dudando, fue a preguntar al ‘Oráculo’ si lo que yo veía no eran los aerobuses de las ciudades espirituales, efecto de una (im)probable mediunidad clarividente de mi parte. Pero mi bisabuela (que visitaba mucho la casa, para velar por mi abuelo) apareció allá y confirmó que eran cosas físicas, pero no de este planeta.
Mi depresión aumentó por no poder "probarle al mundo" la existencia concreta de esas cosas... Terminé con mi novia, andaba como un zombi en el trabajo... Eso cuando no me dormía en el trabajo! En esa época ‘Oráculo’ confirmó que "ellos" son seres materiales (como yo y usted) y que son avanzados científicamente, pero no moralmente. Que yo evitara entrar en contacto mental con ellos y dejara de hacer mis vigilias de madrugada. Yo no le di tanta bola, al final, estaba prácticamente obsesionado con ellos. Intentaba dormir, pero no podía (tengo insomnio hasta hoy). Obvio que iba afuera y me quedaba escuchando música y mirando el cielo. Lo peor es que utilicé la información de Oráculo (contacto mental) para intentar aproximarme a ellos, en vez de alejarme.
Yo creía bastante improbable que ellos supieran (de alguna forma) que yo (una hormiguita, desde la altura en que ellos están) estaba con una filmadora. Qué me diferenciaba de los demás en medio de la multitud? Sólo podía ser el pensamiento, sólo eso! De alguna forma, ellos captan el pensamiento emanado en dirección a ellos. Entonces, una bella madrugada, cansado de quedarme mirando las lucecitas moviéndose en línea recta (sin saber si eran o no satélites, y creo que muchos lo eran), apagué la cámara y resolví hacer un "acuerdo mental" dirigido a una lucecita que pasaba. Pensé: "Yo prometo no filmar si ustedes me dan una señal de que no son satélites". Dos segundos después, una luz de otro color, situada en la "parte de atrás" de aquel punto luminoso subió y se apagó 2 veces. Mi reacción instintiva fue levantar la cámara y encenderla, pero mientras la luz desparecía por "detrás" de la luna, para no reaparecer más... maldición, rompí mi promesa!!
(Continúa... algún día).