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por Saul Brandalise Jr. em STUM WORLDAtualizado em 17/07/2008 11:41:02
Traducción de Monica Aliss - [email protected]
No es porque miramos para el mismo lado y vemos cosas diferentes que no podemos caminar juntos. Esta, para mi, es la ciencia de una vida con respeto y amor. En realidad todos buscamos una única cosa en las personas con las cuales nos relacionamos: Respeto. La palabra clave, en este momento actual y por varios años más se llama RESPETO.
Respeto hacia nuestra individualidad. Respeto al tamaño de nuestra evolución. Respeto a nuestros valores de Fe. Respeto a nuestras manias. Respeto a nuestra manera y forma de encarar los estudios. Respeto a nuestro silencio. Respeto de nuestros gustos. Respeto a nuestra forma de amar. Respeto amplio y profundo a lo que somos agora.
Fue más o menos así que me justifiqué en el mail que redacté en respuesta a la pregunta de un lector. Su duda estaba directamente relacionada a la incomprensión sobre sus verdades por parte de los otros en el medio en el cual el vive…
Paré y pensé: necesitamos diseccionar este tema. Muchas personas terminan relaciones por absoluta obtusidad y falta de visión Cósmica. Algunos aún siguen creyendo que el amor hace la diferencia.
Cuando admitimos algunos valores en nuestras vidas como Reencarnación, Evolución sobre nuestras actitudes, Ley de Libre Arbitrio y Respeto por encima del amor, comenzamos a entender que nada de lo que sucede alrededor nuestro es por casualidad.
Ver eso es para pocos. Algunos llaman de coincidencia al hecho de pensar en una persona y después encontrarse con ella. Algunos llaman de suerte a una persona ganar la lotería, sólo que nunca apuestan. Suerte es cuando el merecimiento y la oportunidad llegan juntos. Algunos creen que es mala racha cuando las cosas van mal. No es mala racha, es cosecha, es el retorno de aquello que plantamos anteriormente. Aprovecharse de alguien y creer que saldremos impunes es como caer en el cuento de comprar el billete de lotería premiado.
Por lo tanto, es fundamental para todos entender, ver, que no es Dios quien quiere esto o aquello. Somos nosotros que pensamos, hablamos, tenemos actitudes. Aquí comienza nuestra destino. Entender esto correctamente elimina cualquier estado de depresión. Es importante que cada ser humano pueda hacer una introspección, un verdadero viaje interior y buscar analizar sus verdades. Somos frutos de estas verdades. Es a través de ellas que vemos la vida. Si ellas, o algunas de ellas estuvieran equivocadas, necesitan ser eliminadas y substituidas por verdades que puedan llenar nuestra alma con la necesidad actual. Si comparamos este ejemplo con un juego de Póquer, este seria el momento de cambiar y pedir nuevas cartas. Nos quedamos con aquellas que creemos son las correctas y las otras deben ser descartadas para que nuevas surjan con mucha fe y esperanza para poder componer un nuevo juego de vida.
Otro punto fundamental es que nadie, mirando hacia la misma dirección, ve la misma cosa. El Escenario se nos presente de acuerdo a nuestra energía de ese momento. De esta forma, es vital cuidar que nuestro cerebro produzca buenas energías. Y esto sólo va a pasar si nuestras verdades se encuentras sintonizadas con nuestras actuales necesidades de vida. Los otros no son iguales a nosotros. Es hipocresía e idiotez querer y buscar lo mismo, una bella combinación sobre como no comprender la vida.
En esta ocasión vale la cita: NO HAY PEOR CIEGO QUE AQUEL QUE NO QUIERE VER.
Sé que nos veremos,
Beso en el alma,
